Dueño de mis sueños

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Porque me gusta ser un caminante
que no le debo nada a nadie
que cuando quiero sentarme... paro
y cuando quiero seguir ... camino.

Porque yo no tengo una musa que alimente mis sueños
tampoco tengo un papel que diga que soy bueno
si ni siquiera tengo en mis bolsillos un peso
pero tengo una alforja cargada de sueños.

Me gusta dormir en el parque
por las tardes que es más fresco
así espero al anochecer
para ver todo mi cielo.

No soy dueño de mi vida
pero hago mis propios caminos.
tampoco de mi corazón soy el dueño
ni lo soy de mi destino.

A mi corazón entró una Princesa.
si es visita no lo sé
pero a quedarse llega
ella es mi musa y ella el papel
ella es mi cielo y ella mi parque.

Por eso no soy dueño. ni siquiera de mi vida
ni soy dueño de mis penas ni soy dueño de.... mis sueños.
por eso soy caminante caminante de la vida
y espero tranquilo la noche
mirándo las estrellas dormidas.
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Ya sé que en el tercer y cuarto verso de la primera estrofa
podría haberlos escrito de esta manera:
"Que cuando quiera parar.... me paro
y cuando quiero seguir... pues sigo".

Pero así me nació, y me gusta como está, porque eso de rimas, de imágenes, de metáforas,
de símiles, de comparaciones, de alegorías, de sílabas exactas... pues...
como que no las entiendo mucho.

Porque yo pregunto: ¿Desde cuándo los sentimientos se rigen por alguna norma o regla?.

¿Acaso le decimos a nuestro corazón: " Hoy corazón, vamos a sentir de esta manera, lo haremos con la sintaxis adecuada, la rima será asonántica, los versos se configuraran de tal manera, el símil será adecuado al contexto la metáfora a utilizar será..... hehehe.

¿A ver?. ¡Esperad!. Creo que tengo una viga en mi ojo hehe..

¡¡Nooo!! ¡No es en mi ojo hehe!
Es una pajita en el tuyo